Astrología y Destino: Robert James «Bobby» Fischer

Por Silvia N. Méndez

Robert James Bobby Fischer nació en la ciudad de Chicago, en los EE. UU. el 9 de marzo de 1943.

Fischer aprendió a jugar a sus 6 años, aunque se destacó más adelante como adolescente prodigio.  Fischer, obtuvo el título de gran maestro internacional (el principal que se puede alcanzar) con un poco más de 15 años.

Era muy creativo e inventivo: por ejemplo inventó un reloj digital especial, que fue toda una revolución para el control del tiempo de la actividad, el cual todavía es utilizado.   

La madre de Fischer, Regina  Wender, era una enfermera suiza que señalaron como agente del comunismo. Esta situación la hizo sentir como una perseguida, y esa paranoia pareciera que la trasmitió a su hijo.

La partida favorita de Spaski

Por Antonio Gude

Durante el llamado Match del Siglo (URSS-Resto del Mundo, Belgrado 1970), le preguntaron en una entrevista a Boris Spassky (vigente campeón del mundo entonces y primer tablero de la selección soviética) cuál era su partida predilecta. Spassky respondió: «Es difícil mencionar una sola de tus partidas, pero la que recuerdo con más cariño es una que jugué hace diez años con el jugador de Leningrado Reshko. Aunque los gustos varían con el tiempo…»

Boris Spaski, el décimo campeón mundial

Por Jesús G. Bayolo

Uno de los más reconocidos periodistas deportivos de Cuba, con trayectoria particularmente orientada al ajedrez, Jesús G. Bayolo, a partir de una anécdota personal sobre un viaje en medio de transporte compartido con Boris Spaski, traza una deliciosa semblanza sobre el excampeón del mundo, el décimo que ha registrado la historia.

Poema dedicado a Boris Spaski

Por Mariano L. Shifman

El oso Spaski despierta y maravilla

Por Leontxo García

Nota de ALS:

Hoy 30 de enero de 2023 es aniversario natal del gran Boris Spaski, quien vio la luz en 1937 en San Petersburgo, Rusia (por entonces Leningrado en la URSS), quien fuera campeón del mundo y uno de los mejores exponentes de la segunda mitad del siglo XX.

Con su derrota ante Bobby Fischer en 1972 en el denominado «match del siglo» disputado en Reikiavic 1972, fue protagonista de un momento icónico del ajedrez mundial que veía, con algo de previsibilidad , aunque ello no escondía el estupor, cómo la maquinaria soviética, esa que había prevalecido claramente desde el fin de la Segunda Guerra Mundial, sucumbía ante el solitario genio norteamericano.

Spaski tuvo éxitos antes y después. Su trayectoria fue en todo caso impecable. Pero, en épocas postreras, parecía preferir divertirse jugando al tenis que afrontar sus compromisos frente al tablero.

En ese tiempo se lo veía como un virtual «oso perezoso», como señala en su vídeo nuestro amigo Leontxo García. Un oso que, por supuesto, podía despertar y brindar, una vez más, una obra de arte, a poco de desplegar la ganialidad que nunca se pierde.

En este caso su vencido será su compatriota Aleksandr Beliavski en la referuda capital islandesa en competencia realizada en 1988, en la que se impuso Gari Kaspárov. Y los que disfrutamos somos todos al comprobar una nueva obra maestra del gran Spaski, cuyo cumpleaños número 85 hoy celebramos.

La nota publicada en El País de España el 30 de septiembre de 2019 se ubica en el siguiente enlace: https://elpais.com/deportes/2019/09/30/la_bitacora_de_leontxo/1569850974_196304.html

Bobby Fischer contra Spassky, el choque de titanes que llevó la guerra fría al ajedrez

Por E.J. Rodríguez para JOT DOWN SPORT

El campeonato mundial de ajedrez de 1972 fue el acontecimiento deportivo más trascendente de todo el siglo XX y lo que llevamos del XXI. Generó mayor atención periodística que cualquier otro evento, incluidos los juegos olímpicos o el mundial de fútbol. Su significación política sobrepasó todo lo que hasta entonces podía imaginarse en una competición deportiva. Incluso las cúpulas gobernantes de las dos grandes superpotencias seguían cada acontecimiento al minuto. Medios de todo el planeta, ávidos de capturar cualquier detalle, se presentaron en Reikiavik, la pequeña capital de Islandia. Un modesto país, hasta entonces poco conocido pero, de repente, señalado en el mapa como sede de un choque de titanes entre el campeón mundial de ajedrez, el soviético Boris Spassky, y su ingobernable contrincante, el excéntrico y genial Robert James Fischer. El mismo Fischer que había saltado a las portadas de las grandes publicaciones durante el año anterior después de aplastar a tres rivales de primera magnitud con una demostración de superioridad jamás vista en los cinco siglos registrados de competición ajedrecística.

Cuando el match por la corona mundial está a punto de comenzar, Fischer no se ha molestado en subir a un avión. Es más, se niega a salir de su escondite en Manhattan. Por enésima vez, su presencia en una competición crucial pende de un hilo. A través de sus abogados, expresa el deseo de cobrar más dinero. El mundo entero contempla con pasmo y con desagrado su actitud, en apariencia fría y calculadora. Va a comenzar el acontecimiento deportivo del siglo y uno de los dos protagonistas no se digna aparecer.

Partidas Memorables: Tigrán Petrosián vs. Boris Spaski, Moscú m/4 1969

Por Zenón Franco Ocampos

Nota aparecida originalmente en el diario ABC Color de Asunción, Paraguay, el 2 de abril de 2013, reproducida en https://www.tabladeflandes.com/zenon2006/zenon_443.html

Durante el primer match con Petrosian, de 1966, un día Spassky se encontró con Botvinnik por las calles, y este le preguntó: “Boris Vasilievich, ¿adivinas siempre las jugadas de Petrosian?”, y Spassky reconoció que “No siempre”.

Spassky descubrió ahí una de las razones por las cuales Petrosian había salido victorioso ante Botvinnik en 1963 y ante él en ese 1966.

En el ciclo de Candidatos de 1965 Spassky volvió a triunfar, ganó con claridad a Geller, y a Korchnoi en la final.

Preparándose para el segundo duelo por el título Spassky dijo: “Me convertí en un verdadero eremita”, pasó tres meses de entrenamiento en Dubná, un pueblo al norte de Moscú, en compañía de sus segundos Bondarevsky y Krogius.

El match a 24 partidas se disputó en Moscú del 14 de abril al 17 de junio de 1969, con el 12 a 12 Petrosian retenía el título.